19 ago 2016

Mensaje 13 ago 2016 - Jacarei - Propaguen mi Rosario, es el arma mas poderosa para el mundo...

MENSAJE DE LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA
“Mis Queridos y Amados Hijos, hoy, estoy feliz por verles aquí nuevamente a Mis pies. Hoy es día 13, es la clausura de Mi Trecena, es también el día en que recuerdan Mis Apariciones en Fátima y en Montichiari, también es la fiesta de Mi Santo Nombre.

Por eso, vengo hoy del Cielo para decirles: “Soy la Señora del Rosario, Soy la Rosa Mística, Soy la Reina y Mensajera de la Paz.”

Mi Nombre es para todos ustedes señal segura de protección, gracia y salvación. Todo Hijo Mío que invoque Mi Nombre, rezando el Ave María con amor, en honor de Mi Inmaculado Corazón, recibirá de Dios grandes Gracias.

Toda vez que Mi Hijo Jesús les escucha rezando el Ave María, bendiciendo y alabando Mi Nombre, Él se rejubila en el Cielo y derrama grandes Gracias y Bendiciones, no solamente sobre ustedes que Me alaban, pero también sobre toda, toda la tierra.

Por eso Mis Hijos, les invito a alabar, bendecir, muchas y muchas veces Mi Nombre todos los días, rezando Mi Rosario, rezando el Ave María con amor. Porque de esa manera, Mi Hijo Jesús derramará sobre la tierra entera, un diluvio de Sus Gracias y de Su Misericordia, sobretodo, transformando tantos corazones áridos, duros, fríos, secos, transformados en desiertos sin amor y repletos de odio, en jardines, en rosedales Míos, repletos de amor verdadero e inflamado por el Señor.

Basta pronunciar Mi Nombre una vez que sea para que muchos demonios caigan de nuevo en los abismos infernales, paralizados y allí quedan por muchas y muchas horas sin poder moverse ni salir, ni tentar a Mis Hijos. Por eso Mis Hijos, cuando ustedes rezan Mi Rosario entero, multitudes y multitudes de demonios, como lluvias de granizo, caen paralizados nuevamente en el infierno y no pueden salir de allí por muchas horas para volver a tentar a las almas.

Oh, cómo sería maravilloso si hubiese algún lugar en la faz de la tierra en que Mi Rosario fuese rezado todo el tiempo sin cesar, un Rosario perenne. Los demonios no podrían atacar tanto Mis Hijos, ni en las familias, ni en las naciones. No podría provocar tantas guerras, no podría provocar tantas tragedias que tiene como origen a él, el padre de la mentira. No podría haber arrastrado también tantas almas, cuantas arrastró y sedujo para el camino de la muerte y de la perdición.  

¡Ay Mis Hijos! ¡Cómo falta el Santo Rosario! Cómo falta un lugar donde Mi Rosario fuese rezado sin cesar por la humanidad que tanto necesita de ese remedio divino, que Mi propio Hijo Jesús dio Conmigo a Mi Santo Siervo, Domingo de Guzmán.

Si Mi Rosario fuese rezado por todos, el poder del infierno sería destruido completamente y no podría hacer más mal a Mis Hijos, ni incluso también destruir la paz en la tierra.

Recen, recen Mi Rosario por lo tanto Mis Hijos, porque en ello hay el poder de Mi Nombre Santísimo que por sí solo es terror de los demonios, es el fracaso para el infierno, es la salvación y bendición para Mis Hijos, es la paz para la tierra y es la concordia para todo el universo.

Mi Nombre basta para transformar un pecador en Santo y para justificarlo. Incluso que el alma esté más negra de pecado de que la propia noche, incluso que haya cometido los peores pecados, si reza Mi Rosario, alabando y bendiciendo Mi Nombre una sola vez que sea en la vida con verdadero amor, prometo dar a ésta alma, todas las Gracias para que se convierta, se arrepienta, haga penitencia, se purifique y se santifique para el Cielo, prometo la salvación.

Mi Corazón ama tanto Mis Hijos que no se cansa de procurar las maneras de ayudarles, de beneficiarles y de salvarles. Soy la Madre que hace todo, todo por la felicidad de Sus Hijos.

Por eso prometo a todo aquel que también invoque Mi Nombre todos los días y el día entero, rezando así: María, Madre de Dios y Mi Madre. Yo te amo, pero haz que yo te ame cada vez más.” Aquel que Me invoque y alabe Mi Nombre rezando ese breve acto de amor incesante por Mí todo el día, recibirá de Mi Nombre grandes Gracias, grandes Bendiciones. Los demonios huirán de esa persona y no podrán tocarla, ni sus bienes, porque Yo cubriré a esos Mis Hijos con Mi Manto de amor.

Soy la Señora del Rosario que vino a Jacareí para pedir a todos Mis Hijos que recen el Rosario, que es el arma más poderosa que Mi Hijo dejó en el mundo para la salvación de todos ustedes.

Recen Mi Rosario, alabando y bendiciendo Mi Nombre 150 veces y prometo que en la fiesta de Mi Nombre Santísimo, todos los años a 13 de Agosto, derramaré sobre esos Mis Hijos, 13.000 bendiciones.

Sí, sí Mis Hijos, quiero que Mi Rosario sea más conocido y amado, más rezado y propagado, porque en ello está el secreto de la destrucción final del infierno y de todas sus obras.

Yo estoy felicísima con sus oraciones y deseo que ustedes continúen rezando todo lo que Yo pedí, porque el poder de Satanás sobre ustedes ya comenzó a debilitarse. Y ahora continuando rezando Mis Oraciones, Mi Rosario, su poder será destruido por completo en ustedes y en sus familias, y el mundo finalmente comenzará a ver la luz de la esperanza, de la misericordia y de la salvación, que culminará con el triunfo de Mi Inmaculado Corazón.

Aquí donde Mi Nombre fue glorificado por Mi Hijito Marcos como nunca en la toda la historia de la humanidad, por los Rosarios Meditados que él hizo por Mí y para Mí, para que Mis Hijos Me alabasen y bendijesen Mi Nombre 150 veces por día a los millares esparcidos por el mundo entero.

Aquí donde Mi Nombre siempre fue honrado con este día especial, con esta fiesta especial.

Aquí donde Mi Nombre y Mis Glorias son proclamados a todos Mis Hijos sin miedo y donde Yo siempre encontré todo Mi consuelo, toda Mi alegría, todo Mi júbilo.

Aquí verdaderamente seguiré haciendo Mis maravillas y seguiré haciendo las mismas maravillas de amor de Mi Corazón a Mi Querida Ciudad de Ibitira*, Mi Ibitira. Para donde irá esta Mi venerable imagen que está aquí y que Mi Hijo Marcos hizo con tanto amor para su padre espiritual Carlos Tadeo, Mi Hijo Predilectísimo.

Verdaderamente en esta imagen derramaré Mis Gracias, Mis Bendiciones. Mis Hijos Me sentirán presente donde ella esté, recibirán Gracias y Bendiciones de solo mirar para ella. A través de esa imagen oiré sus lamentos, sus súplicas, daré remedio y alivio para sus dolores, concederé muchas Gracias para el cuerpo y mucho más para el alma, y a donde quiera que esta Mi imagen llegue, todos Mis 1000 Ángeles de la Guarda descenderán del Cielo juntamente con Domingo, con Bernadette, Lucía, Gerardo, Judas Tadeo, Alfonso y muchos Santos, para derramar allí muchas Gracias sobre todos Mis Hijos.

Sí, aquel que esté delante de esta imagen, recibirá muchas Gracias y la casa que acoja a esta Mi venerable imagen, no será alcanzada por los rayos de la ira de Dios cuando suene la hora de los Castigos y de la Justicia inexorable para esta humanidad criminal.

Sí, para aquella Mi Querida Ciudad de Ibitira, a través de esa imagen, daré muchas Gracias y prometo que ella será muy, muy perdonada cuando vengan los grandes castigos sobre el mundo.

Y sobre este Mi Amadísimo y Predilectísimo Hijo Carlos Tadeo que tanto agrada a Mi Corazón Inmaculado, que tanto encantó Mi Corazón con su fe, amor, obediencia, fidelidad, servicio, con su presencia, perseverancia, fortaleza y templanza. A este Mi Hijo, a través de esa imagen, daré muchas Gracias, también daré señales, daré muchas bendiciones, haré maravillas y aquí debajo de este Mi Manto azul, él siempre estará guardado, protegido y amado por Mí.

(Ahora la Madre de Dios dirige su palabra a Carlos Tadeo):

“Hijo Mío, Predilecto Mío, Carlos Tadeo, llévame, llévame para Mis Hijos, llévame para que Me conozcan, para que Me amen, para que reciban Mi Gracia, Mi Llama de Amor.

Llévame porque tú eres como un nuevo Juan, que Me acompaña, que Me lleva a Mis Hijos, que Me guarda, que cuida de Mí, que cuida de Mis Mensajes, que cuida de Mis cosas, que cuida también de Mi vida que son Mis Hijos que Yo quiero salvar. Esas Mis ovejitas que estaban perdidas como ovejas sin pastor y que Yo te di para que las guarde y cuide para Mí.

Llévame Mi nuevo Juan, Mi nuevo Juan que Me tornará conocida y amada por tantos Hijos Míos, que sin ti, sin tu trabajo, sin tu divulgación, sin tu sacrificio, tu esfuerzo generoso, morirían sin conocerme y se perderían eternamente.

Hijo, ve, porque Mis 1000 Ángeles de la Guarda irán contigo, los Santos del Cielo irán contigo y junto contigo también iré Yo y espiritualmente el Hijo que te di, Mi Hijo más amado, más querido y obediente. Aquel que incluso en medio de tantos sufrimientos y dificultades, pobreza y pruebas, perseveró en Mi servicio y por eso, tienes todo el amor de Mi Corazón, todo el agrado de Mi Corazón.

Tú como él, eres Mi Juan que estará siempre Conmigo y así como Juan estuvo inseparablemente unido Conmigo en la tierra y permaneció después en el Cielo bien junto de Mí en Mi Trono, para reinar Conmigo, para gobernar Conmigo Cielos y tierra en el Reino de Mi Corazón, en el Reino de Mi Hijo que vendrá. Hijo, estoy contigo y no temas porque Yo Soy tu Madre y Mis ojos están siempre cuidando de ti.

A todos Yo bendigo ahora con todo el amor de Mi Corazón: de FÁTIMA… de MONTICHIARI… y de JACAREÍ.”


*Mi Querida Ciudad de Ibitira: “Ciudad Brasileña del Estado de Bahía. Ciudad natal de Carlos Tadeo, peregrino de las apariciones y padre espiritual del Vidente. Carlos es Concejal de la Ciudad y consiguió el feriado municipal el 5 de Agosto (Fecha verdadera del Nacimiento de la Virgen). Actualmente es la única Ciudad en el mundo en declarar feriado municipal por ocasión del verdadero nacimiento de la Madre de Dios.”


MENSAJE DE SANTA FILOMENA

"Doncella Griega de apenas 13 años que fue martirizada en el Siglo IV. Filomena por haber hecho votos de castidad a Jesús, rechazó la oferta de ser Emperatriz del Imperio Romano por parte del Emperador Diocleciano, a lo que derivó en su prematura muerte. Es Patrona de la Juventud. El Santo Cura de Ars, San Juan María Vianney, fue un fervoroso devoto de esta Santa Mártir. Construyó una Basílica en honor a Ella en Ars (Francia) y compuso hermosas letanías en honor a Santa Filomena."  


“Amados Hermanos Míos, Yo, Filomena, Me alegro nuevamente por estar aquí en medio de ustedes después de tantos y tantos años que di Mi primer mensaje.

Yo Soy una Llama incesante de Amor por Dios y por la Madre de Dios en el Cielo y vine hoy para pedir justamente que sean eso: “Llamas incesantes de Amor por Dios y por Ella.”

Cuando viví en la tierra, el Santo Rosario no existía, no había sido dado aún a la humanidad a través de Santo Domingo, pero Yo conocí el Ave María, la Salutación Angélica. ¡Cómo la recé!

En el momento de Mis más crueles martirios, Yo recé el Ave María sin cesar a Mi Madrecita del Cielo. Y el Nombre de Ella Me dio fuerza para soportar todos los martirios, ser arrojada en el río Tíber, ser degollada, ser flagelada, padecer dolores crueles, hambre, prisión, cadenas y malos tratos.

El Nombre de María fue Mi fuerza. Los Ángeles que Me visitaban y que Me curaban, traían en Sus Vestiduras el Nombre de María que Yo tanto amaba y ese Nombre Me dio mucha fuerza para resistir a los crueles suplicios que tuve que padecer hasta Mi muerte.

Por eso también Mi cuerpo fue descubierto en Agosto, muy cerca de la Natividad de la Virgen María y de la fiesta verdadera de Su Nombre*, porque Yo amé mucho el Nombre de Mi Madre del Cielo y ese Nombre verdaderamente fue Mi luz, Mi riqueza, Mi fuerza.

Y si ustedes rezan el Rosario con amor todos los días, ese Nombre también les dará fuerza para vencer todos los sufrimientos, todas las pruebas de la vida, todos los dolores, todas las persecuciones, todas las contrariedades. Y pronunciando, rezando este Nombre con amor, muchas Gracias serán derramadas a ustedes inclusive por Mí, que estoy indisolublemente unida a la devoción del Nombre de María por Voluntad y Obra del propio Dios.

Sean Llamas incesantes de Amor de Nuestra Madre del Cielo, abriendo, dilatando sus corazones más y más por fervientes oraciones, meditaciones, cánticos, por muchas oraciones y súplicas, por muchos actos incesantes de amor. Para que verdaderamente sus corazones puedan recibir la Llama de Amor de Ella en plenitud, que a esta altura ya debería, ya habría transformado toda la faz de la tierra en Su Reino de Amor si no fuese la culpa de los hombres, la demora de los hombres, la dureza de corazón de los hombres que no quisieron recibir esta Llama de Amor que desde hace 25 años Ella ofrece sin cesar aquí.

Por eso, de ustedes hermanos, debe comenzar verdaderamente esa expansión, esa explosión y triunfo de la Llama de Amor de Nuestra Madrecita del Cielo. Por eso, abran sus corazones a Ella y Ella realizará maravillas en ustedes como ha hecho hace tantos años en Nuestro Amadísimo Marcos, que fue el primero que la acogió con fe, gratitud y amor.

Y ahora también en Mi Amadísimo y Predilectísimo Hermano Carlos Tadeo, que también acogió desde que vino aquí, este amor de Nuestra Madre María Santísima, con toda la gratitud y amor de su corazón. Y a medida que los años pasaron, creció este amor, esta obediencia, creció esta Llama en su corazón. Y ahora que ella ya se encuentra bien intensa, bien fuerte, bien poderosa y vibrante, muchas más maravillas la Madre de Dios hará.

Yo di Mi “Sí” a Jesús con apenas 13 años y ese “Sí” hizo con que muchos se convirtiesen, muchos que Me conocieron, muchos que también presenciaron los milagros que ocurrieron en Mi Martirio, viendo Mi Fe, viendo Mi perseverancia, viendo Mi amor, muchos se convirtieron.

La Fe se esparció por toda Italia. Toda Italia hablaba de Mí, de la niña de 13 años que con tanto coraje, amaba al Dios de los Cristianos, el Dios de la Cruz, el Amor de la Cruz y muchos amaron el Amor de la Cruz por causa de Mi Amor, de Mi ejemplo, de Mi “Sí”.

Vean las maravillas que hizo y hace en la vida de tantos, el “Sí” de Nuestro Amadísimo Marcos.

Vean también las maravillas que el “Sí” de Mi Amadísimo Hermano Carlos Tadeo ha hecho no solamente en la vida de Nuestro Amadísimo Marcos, su hijo, pero también en la vida de tantos hermanos alrededor de él, reciben las Gracias de la Madre de Dios, reciben tantas Bendiciones que fueron dadas, regaladas, derramadas como en ninguna otra ciudad de la faz de la tierra hasta hoy.

Por eso, el “Sí” de ustedes, su “Sí” como el Mío, como el de Nuestro Amadísimo Marcos, como el de Nuestro Amadísimo Carlos Tadeo, también abrirá la puerta para muchas Gracias, para muchos hermanos. Den su “Sí” y dilaten su corazón para la Madre de Dios, rezando siempre este pequeño acto incesante de amor, esta pequeña oración que hoy Ella les enseñó: “María, Madre de Dios y Mi Madre. Yo te amo, pero aumenta mi amor por ti.” Y Ella derramará tantas Gracias por la fuerza de Su Nombre en ustedes y también alrededor de ustedes, que ustedes no podrán contar tantas y tantas Gracias.

Sean Llamas incesantes de Amor por la Madre de Dios, diciendo siempre “No” al querer de ustedes y “Sí” al querer de Ella como Yo hice. Cuando Ella Me dijo que Yo saldría de la prisión, pero para sufrir más y morir, renuncié a Mi voluntad, acepté la de Dios y la de Ella, y abracé voluntariamente el martirio por la Gloria de Dios y por la salvación de muchos, inclusive por la salvación de ustedes.

Sí, les revelo solemnemente hoy: “Que los Méritos de Mi Martirio alcanzaron para ustedes la Gracia de la Misericordia, del perdón, de la salvación que la Madre de Dios les ha dado aquí en estas apariciones. Yo también colaboré para que hoy recibiesen tantas Gracias con Mi sangre purísima derramada por amor de Jesús y por amor de Ella.”

Por eso, que el martirio cotidiano de ustedes, de renunciar a las cosas del mundo, de renunciar a la voluntad de ustedes, pues, ese es el martirio que ahora Dios quiere de ustedes. Que su pequeño martirio diario sea generoso también y entonces, ustedes Mis Hermanos, con su santidad, con sus méritos de su sacrificio, de sus oraciones, de su amor, alcanzarán la Gracia de la salvación para muchas almas que sin ustedes no conseguirán salvarse.

Por eso, salven a las almas que están atribuidas, reservadas para ustedes. Con sus sacrificios pueden salvarlas, con su pequeño martirio de cada día pueden salvarlas. Y entonces, ustedes un día subirán en aquellas moradas lindísimas donde Yo habito con los Mártires. E incluso sin haber derramado sangre por Jesús y María como Yo, serán contados como Mártires a Mi lado, porque el martirio de ustedes es el martirio espiritual del alma, martirio místico de los sufrimientos de cada día, que pueden ofrecer para la salvación de muchos.

Esa es la ciencia del amor, feliz quién la comprende, feliz quién en ella cree, feliz quién la ama, porque verdaderamente se tornarán Llamas vivas e incesantes de Amor, que consumiéndose, rezando, amando, ofreciendo, sufriendo a cada día por la salvación de las almas, ustedes poblarán el Cielo de muchas, millares de almas que dependen de ustedes y despoblarán el infierno, porque impedirán que muchas almas vayan para allí.

Por eso Hermanos Míos, vayan adelante, siendo Llamas incesantes de Amor, llevando y anunciando los Mensajes de la Madre del Amor sin miedo y tendrán también la Corona de los Confesores de la Fe como Yo y brillarán como el sol en el Reino de los Cielos.

(Ahora Santa Filomena dirige sus palabras al Vidente y a su padre espiritual):

“Marcos, Llama incesante de Amor de la Madre de Dios, Mi Llama incesante de Amor, Mi reflejo, Mi brillo en la tierra. ¡Cómo te amo! ¡Cómo verdaderamente te quiero, cómo te protejo, cómo te acompaño, cómo te defiendo! No tienes nada que temer porque estoy junto de ti y también junto de Mi Amadísimo Hermano Carlos Tadeo, tu padre espiritual.

Desde que él se tornó tu padre espiritual por obra y poder, voluntad y mandato de la Reina de los Cielos, también Me torné compañera de él, lo cubro con Mi Manto y siempre cuando el demonio quiere agredirle, hacerle sufrir, inmediatamente ya Me postro en oración en el Cielo, rogando por él y ofreciendo Mis Méritos, los Méritos de Mi Martirio, de Mi sangre derramada por él para conseguir auxilio, gracia, fuerza y victoria.

También lo acompaño en todos los Cenáculos que él hace, lo acompaño en su trabajo junto con Judas (Tadeo), e incluso cuando él duerme, velo a los pies de su cama para que ningún mal se aproxime de él y para que él pueda descansar en paz.

Estoy más cerca de él, estoy más próxima y unida a él que el agua que él bebe. Sí Hermano Mío, estoy más próxima de ti de que el agua que bebes, conozco hasta cuantas veces tu corazón late por día, conozco cuantas veces tu pulmón respira, conozco hasta incluso cuantos hilos de cabello tienes en tu cabeza.

Por eso, no temas nunca nada, porque Yo soy contigo y todos los días ofrezco Mis Méritos y Mis Oraciones por ti. Ya tienes gran tesoro en el Cielo, que juntaste con tus oraciones, méritos, buenas obras, amor, servicio y obediencia a la Madre de Dios.

También por los méritos que tu hijo te ofrece todos los días y da a ti. Tienes también gran tesoro en el Cielo por todas las almas que rezan contigo y que tú ya trajiste para la Madre del Cielo y ese tesoro aumentará mucho más, a medida que vayan creciendo las conversiones y las oraciones.

Tienes gran tesoro en el Cielo dado a ti por la Madre de Dios y por Nuestro Amadísimo Marcos, que te ama con todas las fuerzas y con todo el corazón. No es solamente tú que recibes ese amor, que gozas de ese amor y que te delicias con ese amor, Yo también. 

Yo también bajo del Cielo muchas veces por día para quedar cerca de Mi Amadísimo Marcos y sentir la Llama de Amor que él tiene por la Madre de Dios, que él tiene por Mí, que él tiene por los Santos y que encanta y atrae los ojos del Cielo entero.

Cuando él reza, todo el Cielo se mueve en miríadas*, en miríadas de Ángeles y Santos para rezar, adorar y alabar con él. Y es por eso que el Padre escucha no solamente su voz, pero la de todo el Cielo en coro, cantando y rezando con él, como sucedió en aquella vigilia de 1993 en el antiguo monte de las apariciones. Yo estaba en medio de aquellas voces de los Ángeles y de los Santos, rezando con él, porque cuando Nuestro Amadísimo Marcos reza el Rosario, todo el Cielo reza.

Y así también Amadísimo Hermano Carlos Tadeo, tu voz ya es por Nosotros muy conocida y amada, y también apreciamos tu voz cuando rezas. Cuando rezas, Yo también vengo del Cielo con muchos Ángeles para rezar contigo y con Nuestro Amadísimo Marcos.

Por eso, grandes Gracias sucederán por intermedio de tus Cenáculos y oraciones, porque el Cielo estará contigo. Yo estaré contigo rezando por ti, contigo y en todo lugar, y por eso, grandes Gracias serán derramadas.

Tu pueblo, después de los peregrinos que vienen aquí en este sagrado lugar, es uno de los más felices de la tierra, porque nunca la Madre de Dios miró con tanto amor para un lugar, para una ciudad que no es un lugar, un Santuario de Apariciones de Ella. Ella nunca miró con tanto amor y nunca favoreció tanto como ha favorecido a Nuestra Querida Ibitira.

Y a ti, que esto sirva de señal para todos ustedes, del gran amor que Nosotros les tenemos y de lo cuanto Nosotros estamos continuamente rezando por ustedes, luchando por ustedes y defendiéndoles de todos los males.

Por eso Amigo Mío, Hermano Mío, siga adelante, impertérrito* con Nuestro Amadísimo Marcos, porque muchas maravillas te esperan y Yo misma preparo grandes Gracias para ti.

Y a todos ustedes Mis Queridos Hermanos que están aquí. A todos les miro ahora… A todos les amo ahora… A todos cubro con Mi Manto ahora… A todos derramo las Gracias y Bendiciones de cura, protección, salvación y paz que Yo conseguí con los Méritos de Mi Martirio ahora…

Y a todos bendigo solemnemente ahora: de ROMA… de MUGNANO… y de JACAREÍ.

Gracias, gracias por haber venido a esta Mi segunda Mugnano*, que es Mi Santuario. La Paz.”


*La verdadera fiesta de Su Nombre: “La Iglesia Católica celebra litúrgicamente la fiesta del Santo Nombre de María el día 12 de Septiembre.”

*Miríadas:Cantidad muy grande, imposible de calcular o de limitar, de la cosa que se expresa.

*Impertérrito: “Persona que no se altera ante una presión externa.”

*Mugnano: “En la Ciudad Italiana de Mugnano del Cardinale, reposa los restos mortales de la Mártir Griega Santa Filomena.”

1 comentario:

  1. Soy Maria de Nicaragua, resare el Santo Rosario a las 5:30

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