8 de Julio del 2017
Mensaje Público
Una
vez más veo una gran llama que he llegado a reconocer como el Corazón
de Dios Padre. Dice: “Yo soy el Eterno Ahora. No vengo para imponerme
ni para impresionar con Mi poder. Toda la Tierra es Mi testigo. Yo
elijo estos tiempos para hablarles y explicar el desarrollo de los
acontecimientos. Aunque experimenten muchos agravios y pruebas, no han
visto Mi Ira. Yo no elijo Mi Justicia, ustedes la elijen.”
“Si
de verdad entendieran estas palabras Mías a ustedes, se arrodillarían y
golpearían su pecho con dolor. Luego, examinarían sus vidas para
descubrir cualquier transgresión a Mis mandamientos. La realidad es que
pocos comprenden estos tiempos angustiantes. Pocos ven Mi Mano en el
bien y Mi Voluntad permisiva en el mal. Ustedes consideran los
desastres como incidentes aislados, pero Yo les digo, todo está
relacionado como parte de Mi Justicia inminente.”
“Estos
tiempos son malignos y, aun así, están llenos de gracia. Esta
propiedad da testimonio de eso, pues las gracias abundan aquí. Es una
señal en una era en la que el error ha consumido los corazones.
Quédense cerca de Mi cuidado paternal.”
Lean Lamentaciones 3:40
¡Examinemos a fondo nuestra conducta y volvamos al Señor!
9 de Julio del 2017
Mensaje Público
Otra
vez veo una gran llama que he llegado a reconocer como el Corazón de
Dios Padre. Dice: “Yo soy el Señor, su Dios; el Creador de todo el
universo. Yo les digo, Mi Corazón suplica la conversión del corazón del
mundo. Esta generación se ha rebelado contra Mí como ninguna otra lo
ha hecho. Se burlan de Mis mandamientos, cambiándolos en leyes que
apoyan cualquier estilo de vida que eligen. Se niegan a aprender de los
tiempos de Noé o de Sodoma y Gomorra. El otro extremo es aquellos que
obedecen a la autoridad en aras de la obediencia sin reparar en el rumbo
por el que están siendo llevados.”
“Mis
mandamientos son el sendero seguro a la vida eterna. No cuestionen ni
intenten redefinirlos. No favorezcan las transigencias. Su juicio será
eterno. Mi Hijo no negociará con ustedes en el momento en que sean
juzgados. Yo he escrito en piedra el camino al Paraíso. Yo aguardo la
respuesta de cada alma.”
Lean 2ª Timoteo 4:1-5
Yo
te conjuro delante de Dios y de Cristo Jesús, que ha de juzgar a los
vivos y a los muertos, y en nombre de su Manifestación y de su Reino:
proclama la Palabra de Dios, insiste con ocasión o sin ella, arguye,
reprende, exhorta, con paciencia incansable y con afán de enseñar.
Porque llegará el tiempo en que los hombres no soportarán más la sana
doctrina; por el contrario, llevados por sus inclinaciones, se
procurarán una multitud de maestros que les halaguen los oídos, y se apartarán de la verdad para escuchar cosas fantasiosas.
Tú, en cambio, vigila atentamente, soporta todas las pruebas, realiza
tu tarea como predicador del Evangelio, cumple a la perfección tu
ministerio.
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