Mensaje 7 ago 2017 - EE.UU: Dios Padre: Se acerca la hora del principio y el fin...

7 de Agosto del 2017

Mensaje Público

 

Nuevamente veo una gran llama que he llegado a reconocer como el Corazón de Dios Padre.  Dice:  “Yo soy el Padre de todas las naciones.  He venido para compartir este día contigo.  Es una oportunidad más para aprovechar la gracia del momento presente, como sucede todos los días.”

 

“Estás preguntando sobre la Bendición Patriarcal que impartí ayer a los presentes.  Es una bendición muy poderosa.  La persona tiene que estar presente para recibirla.  No se puede pasar de una persona a otra, como se puede hacer con otras bendiciones.  Sin embargo, todo en la persona –o lo que lleva la persona– recibe Mi bendición cuando esta se da.”

 

“Esta bendición es un instrumento de discernimiento que separa el bien del mal en los corazones y en el mundo.  Atrae al alma más profundamente a Mi Corazón paternal.  Esta bendición no se va a dar con frecuencia.  La próxima vez será en la Fiesta del Santísimo Rosario (el 7 de octubre).  La Madre Santísima de Mi Hijo hablará, pero Yo la voy a acompañar, y daré Mi Bendición Paternal.”

 

7 de Agosto del 2017

Mensaje Público

 

Otra vez veo una gran llama que he llegado a reconocer como el Corazón de Dios Padre.  Dice:  “Yo soy el Señor de todas las naciones.  He venido para decirles que se acerca la hora en la que toda la gente y todas las naciones necesitarán elegir el bien sobre el mal.  Es el principio y el fin.  A nadie se le dará la oportunidad de no decidir.  Todos decidirán ya sea por el bien o por el mal.”

 

Lean Joel 3:9-12;  14-15

Publiquen esto entre las naciones:  ¡Santifíquense para el combate!  ¡Animen a los valientes!  ¡Que se presenten y suban todos los hombres de guerra!  Forjen espadas con sus azadones y lanzas con sus hoces;  que el débil diga:  “¡Soy un valiente!”.  Apúrense a venir todas las naciones de alrededor, y congréguense allí.  ¡Que desciendan tus valientes, Señor!  ¡Que despierten y suban las naciones al valle de Josafat!  …¡Multitudes innumerables en el valle de la Decisión!  Porque se acerca el Día del Señor en el valle de la Decisión.  El sol y la luna se oscurecen, las estrellas pierden su brillo.